LLEGAR A UN CORAZÓN...
Llegar a un lugar,
a esa fuerza llamada fe
que llena de amor
a un corazón
es un regalo
compartido.
Llegar a encontrar
la felicidad
de los sueños
realizados.
A veces los sueños
son como
relámpagos de fuego
en la oscuridad
dormida de la noche.
A veces los sueños
relámpagos de fuego
en la noche.
Isidoro Ortega Contreras.